No sé de dónde me viene la pasión por el queso, pero, desde pequeña me ha fascinado. Vaya a donde vaya a comer siempre busco restaurantes que tengan una amplia y variada tabla de quesos. Mi afición por el queso es tal, que he terminado por decidirme a montar una quesería. Un negocio de carácter local en una casa restaurada cerca de la ciudad donde elaboro mis propios quesos artesanales para luego venderlos. Lo cierto es que el proyecto me ha supuesto mucho trabajo, pero el trabajo de reforma de la casa me ha gustado mucho. Además de contar con ayuda de profesionales como Cubiertas Estevez, una empresa especialista en construcción, rehabilitación y reforma de cubiertas en Madrid, he podido aplicar mis propias ideas de decoración y ha sido fantástico.