Los tratamientos para luchar contra las adicciones, como nos han comentado los expertos de despiertabc. son cada vez más importantes en nuestra sociedad y la propia sociedad demanda que sean eficaces. El objetivo no es solo que se deje de consumir drogas, también que el paciente pueda volver a estar en la sociedad de forma útil y activa.
En este sentido, los estudios donde se realiza el seguimiento de pacientes que han estado durante mucho tiempo en tratamiento, suelen reducir los delitos que cometen e incluso se produce una mejora en su vida laboral, social y psicológica.
Debemos saber que está demostrado que las personas toxicómanas tienen tratamientos con metadona participan mejor en las terapias de conducta y se reduce el consumo de sustancias y también de la conflictividad.
El caso es que los resultados de los tratamientos a nivel individual van a depender del alcance y de la naturaleza de la problemática que tenga el paciente, la calidad de los tratamientos y otros servicios utilizados para solventar este tipo de problemas.
La recaída en la adicción es parecida a otra clase de enfermedades crónicas como el caso del asma, hipertensión y la diabetes.
Lo mismo que sucede con otra clase de enfermedades crónicas, las adicciones se pueden manejar con éxito. Este tipo de tratamientos ayudan a luchar contra los efectos disruptivos que tiene la adicción sobre el cerebro de los adictos, así como el comportamiento y que los pacientes recupere el control de su propia vida.
El origen crónica de la enfermedad tiene un significado y es que la reincidencia en los abusos de las drogas no solo son posibles, también existe una probabilidad de que se produzca, pues los índices de recaída son parecidos a los de otras enfermedades crónicas, como pueden ser el asma, diabetes o la hipertensión, los cuales tienen componentes en el plano fisiológico y conductual.
Si se comparan los índices de las posibles recaídas que puede haber entre las drogadicciones y demás enfermedades crónicas, hay que ser consciente es de que el tanto por ciento de pacientes que llegan a recaer en el caso de padecer diabetes de tipo 1 pueden ser del treinta al cincuenta por ciento, si sufren de drogadicción del cuarenta al sesenta por ciento, si están enfermos de hipertensión o de asma, puede ser del cincuenta al setenta por ciento.
Por desgracia, cuando sucede una recaída se suele pensar que el tratamiento es todo un fracaso, pero esto no es así. Un tratamiento exitoso de adicciones por lo general necesita de una evaluación continua y de cambios que se aprueben, similares al enfoque que se adoptará para otra clase de enfermedades crónicas.
En este sentido, cuando un paciente recibe un tratamiento activo para la hipertensión y los síntomas se reducen, se piensa que el tratamiento como tal es de éxito, incluso aunque los síntomas reaparezcan si se deja el tratamiento.
Los pacientes con adicciones saben que las recaídas en el abuso de drogas no indican precisamente el fracaso, lo que dicen es que el tratamiento como tal se tiene que reestablecer o ajustar. En ocasiones nos puede decir que se necesita un tratamiento alternativo.
Es un tema que hay que abordar con seriamente
El tema de las adicciones debe ser tratado con gran seriedad, pues es un problema de gran magnitud, tanto de carácter social como de salud. Para ello, tanto las administraciones como la iniciativa privada debe poner toda la carne en el asador, además de ayudar a que las familias y los enfermos se conciencien en que una salida es posible.
Ojala desaparecieran las adicciones, pero es francamente complicado, pues donde unas parece que se controlan, aparecen unas nuevas o brotan con fuerza otras que parecían ya cosa del pasado. Lo que es más necesario es la conciencia social, pues es el mejor camino para que la sociedad esté preparada para mantener a raya todo este tipo de temas que tanto daño causan todos los años.
Así que ya sabes, desde aquí esperamos haber puesto algo más de claridad a un tema que durante mucho tiempo parecía estar en medio de una neblina que nadie quería aclarar. Las drogas no muerden, como decía Torrente, pero hay que tenerlas respeto y especialmente conocerlas, pues es la mejor forma de evitar los nocivos efectos que tienen.
Desde aquí nuestro apoyo a todas las instituciones que todos los días luchan contra esta plaga que vivimos con las adicciones y con las drogas en particular. Toda ayuda en este sentido es poca, por lo que merece la pena luchar y trabajar para que mejore la situación.