Uno de los mayores atractivos de la cultura española es su gastronomía. La calidad y variedad de nuestros productos hacen las delicias de cualquier amante de la buena comida. Desde el aceite de oliva, al marisco pasando por el vino y, por supuesto los embutidos, y entre ellos el queso, para mí, el producto estrella.
No sé de dónde me viene la pasión por el queso, pero, ya desde pequeña siempre me ha fascinado. Vaya a donde vaya a comer siempre busco restaurantes que tengan una amplia y variada tabla de quesos.
Mi afición por el queso es tal que he terminado por decidirme en montar una quesería. Un negocio de carácter local en una casa restaurada cerca de la ciudad donde elaboro mis propios quesos artesanales para luego venderlos. También estamos terminando de reformar el espacio para ofrecer degustaciones con vino de primera calidad.
Lo cierto es que el proyecto me ha supuesto mucho trabajo, pero el trabajo de reforma de la casa me ha gustado mucho.
Además de contar con ayuda de profesionales como Cubiertas Estevez, una empresa especialista en construcción, rehabilitación y reforma de cubiertas en Madrid. Su amplia experiencia en construcción y reforma de cubiertas y tejados en mal estado ha sido una de las claves de terminar la reforma a tiempo para la inauguración.
Una inauguración en la que he pensado en todo, hasta el último detalle, no faltarán muestras de algunos de los mejores quesos según la World Cheese Awards, como se conoce al mayor escaparate del mundo de quesos y, también la mejor forma de dar a conocer mi propia marca personal.
Los mejores Quesos según los World Cheese Awards
Fue un queso azul noruego el que se llevó el premio al mejor queso del año en la última edición de este Certamen celebrada en San Sebastián. Si bien, además del gran premio del jurado, se otorgaron una gran variedad de premios, entre ellos, el que más me gustó fue el premio “Superoro”.
El Super Gold señala cada año a los mejores quesos del mundo, contando tan solo con siete quesos españoles en esta sección.
Por un lado, entre los más destacados los que más me han gustado son el Cata Blanc, un queso producido por San Canova de Ferreries en Menorca. Esta empresa suele producir queso en Mahon, un queso típico de la isla, pero en esta ocasión se trata de un producto diferente. Es un queso de pasta semiblanda elaborado con la leche de vaca pasteurizada. Se trata de leche de pasto, producida con forrajes de la isla de Menorca. Aroma láctico, intenso y sabor suave. Un producto gourmet de solo 250 gramos.
Otro de mis Super Gold favoritos es el queso conocido por la denominación El Tedeyu, queso acogido a la D.O. Cabrales de leche cruda y entera de vaca, en cuyo interior se desarrolla de manera natural y espontánea el “penicillium roquefortis cabraliensis.” Tiene además un intenso olor a alta montaña y resultan muy sabrosos en la boca, donde prácticamente se funden, con gusto a lácteos con picor suave y un retrogusto largo, aromático a cebolla confitada, flores silvestres y frutos secos.
Por último, y como principal inspiración al tipo de quesos que he decidido elaborar se encuentra el Super Gold de queso ecológico de oveja con miel y romero elaborado por Finca Fuentillezjos, empresa que se embarcó diez años atrás en la aventura de elaborar queso manchego ecológico y que cuenta con una cabaña con nada menos que 2.600 ovejas de raza manchega.
Se trata de un queso con un aroma profundo y limpio, característico de los quesos elaborados con leche cruda de oveja y que ofrece un sabor intenso y elegante, bien definido y potente debido al tiempo de maduración, con final muy redondo y una textura firme y compacta.
Así, en las afueras de Madrid he terminado por crear mi pequeño templo y lugar para todo amante del buen queso y del buen vino.
Un espacio escondido y lleno de encanto donde disfrutar de algunos de los mejores quesos del mundo.
